Sant Joan - Sant Vicent





Domingo 28/02/2010.

Este fin de semana ha tenido lugar un hecho a destacar dentro del mundo biker Mallorquín, los Bous han organizado una kedada por la zona de Na Burguesa, continuando así la tarea emprendida por otros grupos en los últimos años. No pude ir pero por lo que he leído fue todo un éxito concentrándose más de 100 bikers, hubo hasta un avituallamiento de pan con sobrasada.
Enhorabuena Bous.

A mí este finde me tocaba ir a visitar al cuñado y salir el domingo con el grupo de endureros con los que se mueve últimamente.

Sobre las 8:00 salíamos con el coche dirección Sant Joan. Al final los endureros no pudieron venir, alguno tenía compromisos familiares para hoy y decidieron hacer la salida el sábado por la tarde, Juan también fue con ellos así que el tío afronta hoy su segunda ruta en pocas horas.

Empezamos a rodar por carretera y cuesta arriba, me comenta Juan que solo son un par de kilómetros, para calentar:
- Macho en mi isla se calienta llaneando.- jejeje.

Además, de calentamiento nada, el tío mete un ritmo muy fuerte nada más dejar el pueblo, tanto que al rato tengo que hacer la típica parada para ajustar la tija y así respirar un poco (realmente hay muchas variantes: ajustar la tija, revisar presiones, un disco que roza, quitarse ropa ... el caso es parar).

Cuando retomamos parece que ha cogido la indirecta y lo hacemos a un ritmo bastante más asequible, tampoco es cuestión de morir en la primera rampa. A los pocos kilómetros abandonamos la carretera y cogemos un desvío a mano derecha por el que seguimos subiendo de forma mucho más relajada, en parte por el terreno, mas suave, y en parte por el ritmo, mas relajado. Así continuamos un ratito más hasta que enganchamos una pista ancha de bajada, muy rápida si te dejas ir y que acaba en el lecho de un torrente, por el que nos desviamos y que nos acerca hasta la primera ascensión del día: Sa Talaia de Sant Vicent.

Es una ascensión corta, apenas 150 metros de desnivel, pero se llegan a hacer bastante duros; los primeros 50 metros son por cemento, con mucha pendiente, las típicas rampas enlazadas en las que aprovechas el mínimo respiro que te da la curva para coger algo de aliento y tirarte a por la siguiente rampa. Cuando se acaba el cemento empieza un sendero de tierra que mantiene más o menos la misma pendiente, muy duro, de unos 500 metros; ya lo empiezas sentado en la punta del sillín y con el molinete puesto y te va dejando pocos descansillos donde poder respirar; Me planteo poner pie en varios puntos, es más, si llevara a Juan delante y le hubiera visto poner pie hace ya rato que lo habría hecho yo también, solo me anima a seguir el no saber donde se parará él (sí, soy así, k pasa?). Así voy avanzando, sufriendo como un animal solo para no verme superado por el cuñado, al final, cuando lo más difícil estaba hecho, habiendo sobrepasado el punto de mayor desnivel, estando en una zona totalmente asequible y a unos 50 metros del final me vengo abajo y pongo pie, me quedé sin fuelle. Miro para atrás y veo a Juan empujando la burra, el mariquita se ha hecho casi toda la rampa así, anda que si lo llego a saber me pego esta paliza!.

Una vez coronamos el camino nos conduce en suave descenso por una pista ancha y sin muchas complicaciones en la que al tomar una de las curvas vemos aparecer Mallorca al fondo:



La segunda de las ascensiones no la recuerdo muy bien, por lo que no debió ser demasiado dura, sólo recuerdo que nos deja en la cueva de Es Cuieram. Lo que sí recuerdo es la bajada posterior, primero una zona bastante complicada de escalones con bastante pendiente que no logramos hacer ni Juan ni yo (bueno, Juan enganchó algún tramo), y luego una zona pedregosa, muy técnica, que se dio algo mejor, Juan la hizo del tirón y yo parando en cada curva pero por lo menos logré enganchar algún que otro tramo largo.




Acabado el descenso empieza la vuelta hacia Sant Joan donde empezamos a sentir las piernas algo cargadas, sobretodo Juan que lleva dos salidas consecutivas. Mirando los datos objetivos no parece una salida muy fuerte pero tanto sube baja y tanta rampa acaban haciéndose notar.
Según Juan, lo peor ya había pasado, JA!, hemos dejado la subida con mayor desnivel para el final, además subida completita, con su trozo ciclable, su trozo de pateo y su trozo de rampas cabronas, estas son las peores ya que están en el límite de lo que tu nivel te permite ciclar por lo que sabes que las tienes que hacer montado aunque lo que estás deseando es patearlas.

Como no todo va a ser sufrir, para el final hemos dejado la trialera de Sant Joan, estrechita, rápida y con muchas piedras. Aquí es donde me la pegué la última vez que vine con los Maifren, aquella vez no entendí el motivo, ahora lo vi claro, hay una zona de piedras que parece bastante fácil pero en la que la rueda delantera se clava con facilidad, eso unido al cansancio del final de etapa y a que te confías porque no parece gran cosa hizo que saliera por orejas. Esta vez iba preparado y pasé con algún apurillo, supongo que una horquilla algo mejor ayudaría y que el biker fuera algo más hábil también, pero es lo que hay.

Conclusión: Me gusta Ibiza!!! aunque hay que ir con guía, si no, puedes artarte de dar vueltas y vueltas sin llegar a ningún lado.






DistanciaTiempo DesnivelIBP
24 Km4:19 Horas817 Metros73BB

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